Parques Industriales en Mexico

Mantienen una posición preponderante en la industrialización de México ya que éstos contribuyen al desarrollo de la infraestructura del país, incrementan la competitividad de la planta industrial, fomentan la modernización, crean fuentes de empleo, propician la desconcentración industrial, contribuyen a la preservación ecológica, al consumo racional de energía eléctrica y agua; fomentan la capacidad de investigación y desarrollo tecnológico; además, constituyen una solución integral al problema de ordenamiento industrial, incrementan la recaudación fiscal y en general, elevan el nivel de vida de la comunidad en la que se establecen.

Los Parques Industriales tienen sus orígenes en Inglaterra durante la Revolución industrial, proceso de transformación económico, social y tecnológico que generó la necesidad de espacios especializados para el desarrollo industrial. La idea central de estos primeros Parques Industriales era tener acceso rápido a las vías de navegación, puertos y ferrocarriles. Sin embargo, no se trataban de intentos de desarrollos urbanos planificados. Al contrario, fueron producto de los esfuerzos de los empresarios por generar negocios en mejores condiciones. Fue hasta después de la gran crisis de 1930 “La Gran Depresión”, y como consecuencia de ella, que surgió la idea de planificación urbana contemplando la ubicación de Parques Industriales. Allí se dio la verdadera expansión de los Parques Industriales en EEUU y Europa.

Los parques industriales en México surgen en 1965 a partir de una nueva demanda de ocupación de espacios industriales en la frontera con Estados Unidos, impulsada principalmente por la Política de Fomento a la Industria Maquiladora de Exportación en el norte del país; con la instrumentación del Programa de Industrialización de la Frontera Norte. El programa maquilador se basó en el otorgamiento de incentivos fiscales y facilidades aduaneras, para atraer empresas de manufactura de origen extranjero en busca de mano de obra y así generar nuevas fuentes de empleo.

Desde entonces, los parques industriales en nuestro país han evolucionado hasta convertirse en desarrollos inmobiliarios de clase mundial, al ir más allá de la venta o arrendamiento de edificios industriales, al contar con servicios de valor agregado. En este sentido fue que en 1999 fue promulgada la Norma Mexicana para Parques Industriales que sienta las bases para un marco normativo que fomenta las buenas prácticas y define criterios unificados para el desarrollo de Nuevos Parques Industrial de nuestro país.

Fuentes: